Completa y absolutamente normal es hablar de sexo, pero ¿hacerlo también es normal?.
Pensar en el sexo es normal; incluso es normal pensar frecuentemente en el sexo. A medida que las personas maduran física y emocionalmente, se vuelven cada vez más curiosas sobre su sexualidad y sus propios cuerpos. A medida que tu cuerpo atraviese muchos cambios y tus hormonas fluctúen, comenzarás a advertir que algunas personas te resultan atractivas. Es normal sentir atracción sexual e incluso hallarte soñando despierta, a menudo sobre nadie en especial. A veces, pensar en el sexo es inevitable, como en los sueños o en un entorno con muchos pares, como la escuela. Ya sea que pienses mucho o poco al respecto, es natural por lo menos sentir curiosidad y tener pensamientos sobre sexo.
En pocas palabras si, claro, el sexo esta bien. El "mundo sexual" es tan grande y tan amplio que existen diferentes formas de posiciones, referencias, juguetes y lo mas común personas, con las cuales actuar ante el acto sexual. Considerando nuestra época y/o siglo, estamos a un nivel tan avanzado en nuestra mente que todo se congenia sin necesidad de esfuerzo al sexo.
En una conversación reciente con una compañera quedamos en acuerdo de llamar a esta generación: "La generación erótica", porque si en algo todos estaremos bien claro, es que esta generación, valga la redundancia, esta a un nivel de rebeldía alarmante. En mis tiempos (ahora sueno como un viejo) no salían muchachas a los 14 años embarazadas, no "salían del closet" los niños/as a los 13, ni mucho menos se creían "adultos o independientes" a los 15. ¿Que habrá en el agua? Que toda esta nueva generación está tan alborotada. Y es por eso es que nos concierne de que alguna vez hemos hecho algo fuera de orden, por querer encajar en una generación en la cual no podemos, por el simple hecho que va tan avanzada que si no nos podemos al dia nos quedamos y por ende quedamos out.
Me complace decir, que no necesito ni un poco de esa agua para ser así.
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